Los Montes Aquilianos, con sus estribaciones y  área de influencia, componen la mayor área territorial y primera en relevancia del municipio de Ponferrada, con cotas próximas a los dos mil metros de altitud, como la Aquiana, el Tesón, Pico Tuerto, Berdianías, Cabeza la Yegua, el Morredero y Puerto de Portillinos.

La amplitud de este espacio natural supone de una biodiversidad grandiosa, sobre todo debido a las pendientes. Por ello, en las tierras más recogidas podemos encontrar el abedul, la viña y la higuera, además de todo un extraordinario ecosistema asociado al bosque.

Los Montes Aquilianos, a pesar de estar seccionados conforme a una serie de fallas y flexiones datadas posteriormente al Mioceno medio, conservan viejos frentes erosivos en los interfluvios. De este modo, en algunos casos estas áreas están cubiertas, como en la superficie de Brañuelas, por sedimentos del terciario de la era vindoboniense.

La Aquiana, de quien la formación montañosa coge su nombre (también llamada Guiana) tiene una altitud de 1.846 metros, y en su punto más alto se encuentra la ermita de Nuestra Señora de la Aguiana.

En los Montes Aquilianos surcan numerosos arroyos y riachuelos en general de aguas limpias y libres que apenas han sido alterados por la mano del hombre. Estos ríos han permitido la formación de bosques de ribera, junto con una gran masa arbórea que ha dado cobijo a una importante comunidad faunística, entre la que destacan el águila real, el lobo, la nutria y el desmán.