La añada de un vino hace referencia al año en el que las uvas han sido recolectadas. Esta información aparece con frecuencia en la etiqueta frontal, pero puede estar en la contraetiqueta, el cuello de la botella o incluso en el corcho.
¿Cómo se clasifican?
Las añadas se pueden clasificar en regulares, buenas o excelentes. Esta clasificación la realizan los Consejos Reguladores en función de las condiciones climatológicas concretas del año.
¿Es importante para el consumidor?
El vino es el resultado del terreno y la climatología que cambia cada año, por eso no hay dos añadas iguales. A la hora de comprar un vino este dato nos servirá para seleccionar la calidad y para escoger las mejores cosechas.
Sin embargo, no es imprescindible indicar la añada, pues puede darse el caso en el que una bodega decida elaborar vinos combinando añadas, por lo que no tendrá ninguna concreta.
Fuente: www.vinopack.es