El concepto maridaje, se refiere a la placentera combinación entre platos y vinos. Desde Cocina del Bierzo os traemos esta guía para maridajes perfectos.

El objetivo del maridaje es claro: resaltar y destacar las cualidades de ambos productos, de manera armoniosa, ajustada. Este proceso nunca debe “tapar”, ni opacar las características de los platos ni del vino, sino dar lo mejor de sí.

Guía para maridajes perfectos.

Os dejamos estos tips de maridajes para que podáis disfrutar de las maravillas de las elaboraciones culinarias y los vinos.

Maridaje por acuerdo

Este tipo de maridaje se produce cuando el vino y el plato se asemejan o tienen las mismas características. Es lo que muchos especialistas denominan entendimiento por similitud.

Maridaje por contraposición

En este caso, es todo lo contrario al punto anterior. Este maridaje se da cuando las características del vino y el alimento son totalmente opuestas. Es decir, se complementan por diferenciación. Los casos más conocidos son: el queso azul y vino dulce, las comidas picantes y los vinos blancos ligeros.

Vinos y carnes rojas

Aquí vamos a distinguir dos tipos de carnes rojas a la hora de maridar con vinos:

  • Carnes grasas: Este tipo de carnes encajan a la perfección con vinos tintos de variedades intensas, con paso por barrica.
  • Carnes magras: Este tipo de carne combinan muy bien con tintos, con leve paso por barricas y variedades con taninos medios o escasos.

Vinos y pescados

Aquí, como en el punto anterior, vamos a diferenciar dos tipos de pescados a la hora de maridar:

  • Pescados grasos: Este tipo de pescados se entienden muy bien con blancos con prolongado paso por barrica o tintos ligeros.
  • Pescados magros: Estos pescados obtienen la combinación perfecta con los vinos blancos ligeros, frescos, frutados.

Vinos y carnes blancas

El Pollo y cerdo consiguen una excelente combinación con vinos tintos leves o con leve paso por barricas. Entre los vinos blancos que encajan muy bien se encuentra los jóvenes con un pequeño paso por madera.

Vino y dulce

Lo ideal en este maridaje es que lo dulce vaya con lo dulce. Tartas, postres, frutas y elaboraciones con cierto tenor dulzón, su combinación perfecta son los espumosos, semiseco, dulces y vinos de cosechas tardías o dulces naturales.

Guía para maridajes perfectos

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