Esta ruta arranca en la bella localidad de Peñalba de Santiago y tras 18,4 kilómetros se llega a El Acebo, un antiguo pueblo por el que cruza el Camino de Santiago.
La ruta, que tiene un nivel de dificultad medio, recorre una zona que conserva las huellas de las antiguas herrerías, donde los herreros transformaban los minerales de la zona en herramientas y utensilios para la vida del campo. La más destacada pervive en la localidad de Compludo. Se trata de una antigua fragua que utilizaba la fuerza del agua para generar una corriente de aire que avivaba el fuego de la forja. La herrería ha sido declarada Monumento Histórico Artístico de carácter nacional.
También en Compludo se puede admirar el impresionante calvario románico tallado en madera de nogal que se guarda en la iglesia de San justo y San Pastor, del siglo XVI. Después llegamos a El Acebo, una pequeña aldea que se construyó de forma lineal, siguiendo el paso del Camino de Santiago. En su día, los peregrinos encontraban en el Acebo uno de los muchos hospitales que se repartían a lo largo del camino.
Foto: leonoticias